SEA LA PAZ
Levanto mi voz para convocar a los míos. Mi sangre derramada en campos de guerra clama la Paz para las naciones.
Mi Carne entregada a las garras del león clama compasión.
Levanto mi voz en la tierra para que retumbe en la eternidad, levanto mi voz con los espíritus de todos los tiempos en el Nombre del Sumo Hermano de los hombres, el Cristo. Sea La Paz en cada espíritu encarnado de todo el universo.
Sea La Paz.
D.8