El tren de carga que cada día transporta encaramados en sus vagones a miles de emigrantes centroamericanos a través de México rumbo a EE UU descarriló la madrugada de este domingo. Los servicios de emergencia trabajan en el lugar del accidente, una zona de difícil acceso en el Estado de Tabasco a la que solo se puede llegar por lancha o helicóptero. La Secretaría de Gobernación confirmó a través de Twitter que hay al menos cuatro personas muertas y 35 heridas, 16 de ellas en estado grave.
El accidente del tren conocido como La Bestia se produjo a las tres de la mañana en el municipio de Huimanguillo, en la frontera con el Estado de Veracruz, al sur del país. Es imposible saber con certeza cuántas personas viajaban en el tren este domingo.
Fray Tomás González Castillo, director del albergue de migrantes La 72, situado en Tabasco a unas cinco horas de accidente, explicó por teléfono que en la zona del siniestro no hay señal de celular y que, aunque a estas horas aún se desconoce la identidad de las víctimas, “seguramente son hondureños, salvadoreños o guatemaltecos”.
El camino de más de 5.000 kilómetros de los miles de emigrantes que tratan de cruzar México para alcanzar Estados Unidos es un campo minado que cada año devora miles de vidas. Al acoso de las cárteles y las mafias se suman los rieles de La Bestia, sobre el que los emigrantes viajan sin ningún tipo de protección.
